Contenido



Ex novia

Robert Sergel
Ir al contenido

Caminar: instrucciones

Isaac Monclús

Hay una escena en Gente en sitios, la película de Juan Cavestany, en la que un tipo ha olvidado cómo caminar. “¿Qué te pasa?”, le pregunta otro. “Que he olvidado caminar.” “Joder… Es fácil, mira.” “Coño, ¡gracias!” Parece absurdo, y de hecho lo es. Aunque no es una tontería. Primero un pie, un leve balanceo, luego el otro, y así sucesivamente. Así empieza todo. De eso va la cosa.

Ir al contenido

El ocaso del territorio

Javier Calvo

En cuatro décadas de trabajo subterráneo, el escritor y cineasta Iain Sinclair se ha convertido, a su pesar y el de la oficialidad británica, en el último personaje de la literatura de las Islas. Tótem del underground, teórico urbano sin teoría, cronista de la gentrificación y acérrimo enemigo de los grandes proyectos políticos, nada de ello le impide la celebración del caos urbano. Su filosofía se construye a partir de una actividad simple, el caminar, que en su persona se vuelve acto de combate, objeto de performance y medio de investigación mitográfica. 

Ir al contenido

Paseo.exe

Luis Montero

“Mas que ver el mundo, lo leemos”Gilles Deleuze. Conversaciones.

Ir al contenido

When smoke becomes fire, my love reveals...

Alex Reynolds
Ir al contenido

Qué coño es el agua

Álvaro Marcos

Van dos peces jóvenes nadando una mañana y al poco se encuentran a un pez viejo que, al cruzarse con ellos, les saluda y les dice “Buenos días, chavales, ¿qué, cómo está hoy el agua?”. Los dos peces jóvenes siguen nadando y al rato uno para y le pregunta al otro: “¿Qué coño es el agua?”.

Ir al contenido

El momento de construir un nuevo edificio

Carlos Fernández Barbudo, Pedro Abellán Artacho

Frank y HAL se vuelven a encontrar. Esta vez lo hacen en una cafetería de una populosa ciudad de la Tierra, sin un tablero de ajedrez ni nada que los distraiga de aquello sobre lo que quieren hablar; o sea, reflexionar. 

Ir al contenido

La tableta no piensa

Javier Sampedro

Según un estudio de 2011 recogido por el científico cognitivo Daniel Levitin, de la Universidad McGill, recibimos cada día una masa de información equivalente a 174 periódicos. Esto no quiere decir que la ‘leamos’, naturalmente, pero tampoco leíamos antes el periódico de arriba abajo. También vemos cinco horas de televisión al día, de entre las 85.000 que producen diariamente las más de 20.000 emisoras del mundo. Y nunca nos va a faltar material, porque cada hora se suben a YouTube 6.000 nuevas horas de vídeo. No hablemos del bombardeo de tuits ingeniosos y correos electrónicos fatigosos que nos sepultan cada minuto en un berenjenal de confusión y vacío.

Ir al contenido

Poly-Spam

Cristina de Middel

Un día cualquiera recibo en mi buzón la carta de una mujer de mediana edad que poco antes de someterse a una operación a corazón abierto decide pedirme ayuda pues necesita con urgencia que alguien administre su inmensa fortuna. Poco después una joven trata de convencerme de que me case con ella para acceder a una suculenta herencia. El martes siguiente, un abogado africano me elige para compartir conmigo una cuenta sin dueño; a la vez me entero de que acabo de ganar la lotería y un Toyota nuevo.

Ir al contenido

Reenactment

Bruno Galindo

El mundo actual es un gigantesco remix de materiales tiempos pasados y nuevos. ¿Vivimos o revivimos? ¿Es viejo lo nuevo?

Ir al contenido

Algunas consideraciones sobre la actual...

Félix de Azúa

Entre los años ochenta del siglo pasado y el comienzo del siguiente se dio en España un crecimiento acelerado, acompañado de ambiciosas reformas democráticas, que causó una impresión indiscutible de salida del agujero franquista. Era engañoso. Ha bastado una crisis financiera, neutralizada en otros países con escasas pérdidas, para desnudarnos y devolver las cosas a donde estaban antes de la muerte de Franco.

Ir al contenido

Deadline

Will Steacey, Miguel Mora
Ir al contenido

Mi querida Expaña

Fidel Moreno

Lo que había ya no lo hay y lo que hay puede ser lo que hay o puede ser otra cosa. Insertos en una realidad cambiante, falta perspectiva para entender lo que ocurre. Mientras el periódico no para de anunciar defunciones (del fin del bipartidismo al fin del reinado de Juan Carlos I), lo emergente tarda en asentarse. España no es la que era y nosotros tampoco somos ya los mismos. 

Ir al contenido

Cosmopop

Miguel Trillo
Ir al contenido

¿Qué fue del jacksonismo?

Peio Aguirre

La reciente publicación de Jacksonismo. Michael Jackson como síntoma (La Caja Negra, Buenos Aires, 2014), traducción de The Resistible Demise of Michael Jackson (Zer0 Books, 2009), supone una magnífica ocasión para revaluar el ascenso y caída del Rey del Pop un lustro después de su muerte. Editado por el crítico musical y teórico Mark Fisher, cuenta con una veintena de notables firmas, ejemplo de una crítica cultural como sintomatología de las transformaciones sociales, económicas y culturales en nuestra era posmoderna. 

Ir al contenido

El fuego inextinguible de Harun Farocki (...

Carlos Casas

"¿Cómo podemos mostrarles el napalm en acción?

 

Si les mostramos imágenes de quemaduras por napalm cerrarán los ojos. Primero cerrarán los ojos ante las imágenes, luego cerrarán los ojos ante la memoria, luego cerrarán los ojos ante los hechos, luego cerrarán los ojos ante todo el contexto.

 

Si les mostramos una persona con quemaduras de napalm, heriremos sus sentimientos. Si herimos sus sentimientos, se sentirán como si estuviéramos probando el napalm sobre ellos, a sus expensas.

 

Solo podemos darles un pequeño indicio de cómo funciona el napalm."

Ir al contenido

Zaragoza contra la provincia

Sergio del Molino

¿Qué pasa en Zaragoza, que debajo de cada baldosa rota tiene un escritor? Como todas las ciudades, dirán algunos, porque éste es un país de escritores sin lectores. Todo el mundo escribe aunque nadie lee. Pero lo de Zaragoza es otra historia. No sólo tiene muchas más baldosas rotas que otras ciudades, sino que los autores que viven debajo de ellas no son vates de provincias.

Ir al contenido

Transferencias no necesariamente exactas

Mariano Mayer

En tránsito entre Madrid y Buenos Aires, mejor dicho, a pocas horas de estarlo, me encontraba la segunda vez que visité la reciente exposición individual de Julia Spínola en la galería Heinrich Ehrhardt. Y el tránsito aquí es una cuestión medular, no sólo por el hecho de que el viaje empezó antes de tiempo al descubrir que la fecha de partida no era la que recordaba, sino porque las piezas escultóricas y los papeles que conforman Uno zurdo y uno diestro, y uno zurdo y uno diestro disponen eso que, a falta de un sentido más exacto, reconozco como un tránsito entre arte y poesía. 

Ir al contenido

¡Dinamita!

Pedro G. Romero

Lorena Álvarez y su Banda Municipal, junto al Coro de Ladinamo y el Patio Maravillas, han publicado recientemente el álbum Dinamita (Producciones Doradas, 2014). El canto siempre es una suma de voces, el canto siempre son dos hablando. Algo así me decía Enrique Morente intentándome explicar su fascinación por la polifonía, las masas corales; hasta su querencia por la reverb parecía venir de ahí. 

Ir al contenido

Un perro y un sol para Leopoldo María Panero

Bruno Montané Krebs

Soy un ser racional

En noviembre de 2004 tuve oportunidad de acompañar a Leopoldo María Panero a Santiago de Chile, donde fue invitado para participar en el III Encuentro de Fronteras (“El Factor Poesía”). Mi papel consistía en hacer de acompañante (o loquero) y, al mismo tiempo, tratar con los responsables de la organización (el novelista Roberto Brodsky y el poeta y comunicador Cristián Warnken) y con los periodistas que supuestamente querrían entrevistar al poeta; en fin, introducir a Leopoldo en ese asunto llamado Chile.

Ir al contenido

Arte religioso y arte pornográfico

Ángel González García

Que yo escribiera estos dos ensayos casi al mismo tiempo no es, probablemente, motivo suficiente para publicarlos juntos. Su reunión os va a parecer a muchos no tanto caprichosa como fuera de lugar, intrínsecamente falta de decoro, si por decoro se entiende correctamente no sólo la presencia de imágenes obscenas en una iglesia, sino además, y quizás peor, la de imágenes devotas en un prostíbulo. 

Ir al contenido

Diálogo intergeneracional

Forges & Fraguas
Ir al contenido

Funerales anómalos del arte contemporáneo

Fernando Castro Flórez
Enterramiento del Pontiac de Javier Utray (17/11/05) 

En Morille, pueblo salmantino de 263 habitantes, se toman muy en serio la teoría de Theodor W. Adorno sobre los museos y mausoleos: en lugar de exponer las obras de arte, allí las entierran. Entre las piezas sepultadas hay obras de Isidoro Valcárcel Medina y Esther Ferrer, Paul Naschy y Bernardí Roig, el Pontiac Grand Prix de Javier Utray, la pepita de oro del V Virrey de Sicilia y hasta la Jabulani con que la selección española ganó el Mundial de Sudáfrica, cortesía de Vicente del Bosque. Ésta es la historia de un lugar raro.

Ir al contenido

Discos

Álex Sánchez
Ir al contenido

Diario chino

Ray Loriga

La pedicura está sobrevalorada.

Todo lo extraño era chino. Me hablas en chino, hablo en chino, ellos hablan en chino. Nunca entendí nada. Acertaron quienes, como yo, dudaron de mí.

Ir al contenido

La edad del bronce

Alexandre Serrano
PORRINA DE BADAJOZ. CON ANTONIO ARENAS Y RAMÓN MONTOYA.
Ir al contenido

Ciertas formas de hedonismo

Guillermo López

Arquitectura-G. Aitor, Igor, Jonathan y Jordi. Los Ge. Han trabajado, mitad por azar, mitad por necesidad, con el interior de la arquitectura como materia prima y, en poco tiempo, han sabido delimitar a partir de algunos efectivos microcosmos interiores su propio hábitat en el panorama de la arquitectura barcelonesa, todo un bastión sobre el ruido ambiente.

Ir al contenido

Diccionario escéptico

Miguel-Anxo Murado
Ir al contenido

Donde el pop pierde su forma

Sabel Gavaldon
Mi pathos doy, Carlos Pazos (1981)

 

Un recorrido populista a través de la exposición del MACBA La herencia inmaterial. Ensayando desde la Colección.

 

Hace algún tiempo, Mark Leckey dijo en una entrevista que su mayor orgullo como artista era que un trabajo suyo se hubiera convertido en un auténtico fenómeno pop gracias a internet. Se refería a Fiorucci Made Me Hardcore, un vídeo de 1999 con el que este artista se adelantó a YouTube remezclando fragmentos de metraje amateur en un recorrido anfetamínico por las distintas subculturas juveniles que transformaron las pistas de baile inglesas desde los setenta. 

Ir al contenido

Registros (I)

José Luis Gallero
Ir al contenido

La historia no se repite, pero rima

Manuel Segade

Hace un siglo que el Fin de Siglo terminó, con el arranque de la Primera Guerra Mundial en 1914. Su gestación como fenómeno cultural fue una respuesta a su tiempo, aquel mundo del siglo XIX que, aparentemente, empezaba a quedar atrás. En el libro Narciso Fin de Siglo pretendí explicar —desde la cultura artística, literaria, escénica, filosófica, esotérica, médica o sexual— cómo la puesta en crisis de lo moderno fue parte constituyente de su propio alumbramiento. 

Ir al contenido

Claveles y tomates

Eduardo Iglesias

Había dejado atrás una vida de orden y concierto: una fábrica en Hernani, un sueldo considerable, a un padre que la había creado y un peso en el alma y en mi conciencia desde que vislumbré el futuro que me aguardaba si no me rebelaba contra él. Individualista hasta las últimas consecuencias salvo cuando me enfundaba una camiseta de un equipo de fútbol y había que luchar también hasta el final por mis compañeros.

Ir al contenido

Siete Ardillas

Robert Sergel
Ir al contenido

Gastroapocalipsis

José Manuel Ruiz Blas, Alberto Flores

El fin se acerca. El Día Después, el day after, se aproxima, y una variedad de catástrofes se cierne sobre la especie humana. Calentamiento global, tsunamis, fuegos del infierno, seísmos, colapso económico mundial, epidemia zombie, meteoritos impactando en la superficie terrestre. Y no hay que soslayar la amenaza nuclear, el hongo gigante abrasando el paisaje, el destello luminoso de las luces de Ozymandias y el posterior Reino de las Sombras bajo una campana de hollín.

Ir al contenido

Pequeño libro de la verdad & pequeño...

Lilli Hartmann
Ir al contenido

Sin permiso para inventar

Susannah Hunnewell

Después de Limónov y en paralelo a la publicación en Francia de Le Royaume su última novela de no ficción, se acaban de reeditar en castellano El bigote y Una semana en la nieve, dos libros escritos hace veinte y treinta años, viejos tiempos en los que Carrère aún se daba “permiso para inventar”. En esta entrevista el autor francés explica la moral que hay detrás de su progresivo alejamiento de la ficción y cuenta una por una las historias que hay detrás de cada uno de sus libros.

Ir al contenido

Philip Larkin

Íñigo F. Lomana

Sí, debo confesar que la intención era malsana. Solía peinar la red con una regularidad patológica en busca de alguna foto nueva. Quizá, por fin, la de esas vacaciones que pasó con su novia en la Isla de Sark. O, si tenía mucha suerte, la de aquella noche en que se sentó a cenar con Vargas Llosa invitado por Mrs. Thatcher. No quería dejar ningún cabo suelto en mi obsesión con Philip Larkin. Nunca pensé, sin embargo, que mi paciencia sería tan bien recompensada. 

Ir al contenido

No están en venta a ningún precio

Amanda Petrusich

Pete Whelan es uno de los pioneros en el coleccionismo de discos de jazz y blues raro de 78 revoluciones, además del fundador y editor de 78 Quarterly, revista creada a finales de los ‘60 por y para tipos como él. En la era anterior a Internet, 78… hacía las veces de una biblia laica para los iniciados, que se podía adquirir en pequeñas tiendas de discos o por correo.

Ir al contenido

Trabajos Manuales

Álex Sánchez

  

Ir al contenido

— NYC —

Marcos Giralt Torrente

  

Ir al contenido

Sunshine Ghetto

Iván López Munuera

Pese a que en los últimos años se han dado nuevas nociones sobre los espacios de lo político y las distintas formas de activismo, los espacios de baile, el baile en sí y la música pop (o formas musicales populares urbanas, ya sean rock, punk, postpunk, disco, tropicalismo, psicodelia, tecno, electro, hip-hop…) siguen siendo percibidos como campos de alienación y banalidad.

Ir al contenido

Seísmos, vino, arte

Manuel Saiz

Hasta el momento he experimentado siete terremotos. El primero fue cuando era niño, una noche mientras estaba viendo la televisión con mis padres después de cenar. Recuerdo cómo la lámpara de pie del cuarto de estar se deslizaba por el suelo, y las piezas de cristal de la otra lámpara que colgaba del techo comenzaban a tintinear. También creo recordar, pero podría ser sólo una ilusión brumosa, que en ese momento estábamos viendo un episodio de Misión: Imposible.

Ir al contenido