Según un sistema mío
El crítico de cine se sienta a esperar sobre su suelo pélvico a que le pongan una película y a medida que la va viendo la va rumiando, y en el tránsito al segundo acto tal vez se empezará a preguntar si está siendo buena, si resulta entretenida o le parece regular, aunque lo regular es lo que menos debería interesarle porque el término medio es un lugar común, es allí donde el cine se atocina y entrega su magnetismo y se diluye en costumbre y en mal de muchos. En su aspiración a ser...